Pink Bullets...

Abres los ojos, estás sentado sobre tu cama.
El reloj marca las 9 y 45. Te levantas y enciendes la pc, notas que junto a tu cama hay una maleta negra bastante pesada y una pequeña mochila azul con el nombre de una universidad de la cual no habías escuchado hablar.

Miras alrededor y sientes un frío que ya habías olvidado que es inevitable sentir.

Es cuando te preguntas si todo fue un sueño.

Es cuando te pones a pensar que muy pocas cosas que pasaron se sintieron muy reales, especialmente al final. Miras la fecha en tu celular y te preguntas si es que pudiste pasar 9 días dormido, y después despertar sentado sobre tu cama, te llamas a ti mismo pendejo e intentas tragarte (sin éxito) ese nudo que tienes en la garganta y que se niega a desaparecer.

Tu cuerpo te está pidiendo cafeína a gritos.
Tienes que acostumbrarte a la rutina de nuevo.

No hay otra opción.